Por Herman Beals
El crucial momento de la verdad llegó el martes para ocho de los 32 participantes en el Campeonato Mundial de Fútbol, con cuatro de ellos pasando a la etapa de los últimos 16, y con otros cuatro haciendo las maletas para regresar a sus hogares.
Cuatro países latinoamericanos (tres de ellos de América del Sur) clasificaron, cantidad que podría subir a seis si Paraguay y Chile se unen a Brasil que ya tiene los puntos suficientes para avanzar a la “Ronda de la Muerte”, como es conocida la segunda etapa.
Los triunfadores fueron Uruguay y México, en el Grupo A. Quedaron eliminados Sudáfrica y Francia.
Argentina y Corea del Sur clasificaron en el Grupo B. Quedaron eliminados Nigeria y Grecia.
Es la primera vez en dos décadas que Uruguay, el primer campeón que tuvo el mundo, en 1930, avanza a la segunda ronda. Más aún, lo hizo con su valla invicta, tras su victoria sobre México por 1-0, con gol de Luis Suárez, a los 43 minutos. Totalizó siete puntos en sus tres partidos.
Este parece ser el torneo de “la primera vez”.
Es la primera vez que el país organizador del torneo es eliminado en la ronda inicial.
Y, posiblemente, es la primera vez que un ex campeón mundial y finalista cuatro años antes, se desintegra como lo hizo la escuadra francesa. Celos, resquemores, rencillas y jugadores que ya dejaron sus mejores años atrás, fueron vitales en la eliminación de Francia.
Hasta la ministra de Deportes de Francia, Roseylene Bachelot, intervino en la situación. Pero su filípica a los jugadores no dio los resultados esperados.
“Para sus hijos, nuestros hijos, quizás ustedes no serán más héroes”, les amonestó el día anterior a la última derrota. “Ustedes han manchado la imagen de Francia. Ustedes son desastre moral”.
Algunos jugadores lloraron, pero el mal ya estaba hecho.
Iba a ser un largo viaje de regreso a París para el entrenador Raymond Domenech y sus jugadores, eliminados de un torneo que podría ser recordado más por las molestas vuvuzelas (cornetas) en las tribunas que por el fútbol ofrecido por algunos de los competidores tradicionales.
Sudáfrica celebró la victoria de 2-1 ante Francia, que jugó con 10 hombres la mayor parte del encuentro, pero sus cuatro puntos no le bastaron para desplazar a México que, con igual número de puntos (4), superó a los sudafricanos, estrechamente, por diferencia de goles a favor y en contra.
Los bafana bafana (niños) de Sudáfrica se lucieron entre los aplausos de su público, pero ahora está por verse si la ausencia del dueño de casa influirá en el entusiasmo de los aficionados locales.
Argentina no tuvo que esforzarse mucho para triunfar por 2-0 sobre Grecia. Dos Martin anotaron sus goles. Martin Demicheles a los 77 minutos y el veterano Martín Palermo a los 88. El teatral entrenador Diego Maradona envió a media docena de suplentes al campo y estos le respondieron bien.
Corea del Sur, por el contrario, debió esforzarse al máximo para empatar 2-2 con Nigeria, que se unió así a Camerún y Sudáfrica entre los que terminaron su actuación.
Argentina finalizó la primera ronda con un récord perfecto de tres victorias en tres partidos. En la segunda etapa, de acuerdo con el sorteo previo, enfrentará a México, lo cual significará que uno de los equipos latinoamericanos quedará eliminado.
Uruguay enfrentará a Corea del Sur. El cuadro sudamericano ha impresionado con su accionar, pero los asiáticos son atléticos y difíciles de superar.
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